La creación de huertos urbanos colectivos en ciudades se ha convertido en una tendencia creciente. Los nuevos cambios que están sufriendo muchas ciudades en cuanto a sostenibilidad ambiental e inclusión social, así como en materia de salud, ha dado lugar a que los huertos urbanos creen un gran interés general.  

Únicamente en España, se ha pasado de contabilizar alrededor de 1.000 huertos urbanos durante el año 2000 a más de 15.000 huertos urbanos en el año 2017. Es decir, los huertos urbanos siguen creciendo, siguen proliferando con el principal objetivo de lograr unas ciudades mucho más sostenibles y saludables.

Huertos urbanos colectivos en ciudades, ¡aumentando la calidad de vida!

Desgraciadamente, la gran mayoría de las ciudades actuales se encuentran excesivamente contaminadas, masificadas y son demasiado ruidosas, lo cual merma la calidad de vida de sus ciudadanos. Ante esta cruda realidad, la aparición de los huertos urbanos colectivos en ciudades, la aparición de los huertos urbanos de participación ciudadana, se ha convertido en una alternativa en auge.

La creación de esta clase de huertos urbanos son una magnífica alternativa de educación ambiental para los ciudadanos, por lo que no resulta de extrañar que la creación de este tipo de entornos sea cada vez más demandada, con el objetivo de incrementar el bienestar personal, así como mejorar el entorno.

Los huertos urbanos han logrado convertirse en una nueva fuente de suministro para las ciudades. Este tipo de espacios ha logrado multiplicarse a pasos agigantados, lo cual no solo ha promovido la educación ambiental, sino que también ha conseguido promover la creación de espacios verdes, la reutilización de materiales, formar redes vecinales, crear de grupos de consumo afines, etc.

Huertos urbanos, una valiosa herramienta de sensibilización

Los huertos urbanos colectivos en ciudades están logrando convertirse en una importante y valiosa herramienta de sensibilización y formación para los habitantes de las ciudades. Ello ha provocado que se convierta en una herramienta esencial a la hora de llevar a cabo la planificación urbana de muchas ciudades de todos los rincones del mundo.

Llevando a cabo una adecuada gestión y planificación de este tipo de espacios verdes, pueden llegar a convertirse en una importante e interesante fuente de suministro de alimentos para las ciudades. Potenciar más locales y espacios dedicados a la producción ecológica que no dependan de la necesidad de combustibles fósiles, así como que sean capaces de generar empleo cuidando y mantenimiento los recursos naturales es vital.

El importante ahorro que implican los huertos urbanos es, sin lugar a dudas, uno de sus grandes atractivos, pero no el único. Lógicamente, contar con un huerto urbano en el que poder cultivar tus propios alimentos permite aumentar la ingesta de verduras y disminuir el consumo de carnes y alimentos precocinados. Asimismo, ayudan a mejorar la biodiversidad, además de promover la reutilización de los desechos urbanos, eso por no hablar de las muchas implicaciones sociales que conllevan. Como se puede comprobar, no es de extrañar que los huertos urbanos colectivos en ciudades estén en auge, y todo parece indicar que va a más. Han pasado de ser una moda a un estilo de vida.

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