Los huertos urbanos son mucho más que una estupenda solución para poder comer de manera saludable en casa, sabiendo cómo han sido cuidadas tus hortalizas y verduras antes de llevarlas a la mesa. En la actualidad, cada vez son más las personas que desean hacer de su huerto urbano un negocio.
Montar un huerto urbano puede ofrecer muchas posibilidades que van mucho más lejos que el hecho de comer mucho más saludablemente y adquirir una mayor conciencia con el medioambiente que nos rodea.
Haz de tu huerto urbano un negocio
Si se dispone de un huerto urbano con bastante espacio, debe decirse que la gran ventaja es que la producción es continua y abundante, por lo que una parte puede ser empleada para consumo propio, mientras que la otra parte puede ser destinada a crear tu propio negocio.
Las verduras y hortalizas naturales y ecológicas resultan sumamente atractivas, de modo que no es de extrañar que cualquier persona o negocio pueda mostrar interés en los productos que cultivas en tu hogar o tejado, desde vecinos hasta mercados o restaurantes de la zona que buscan ofrecer a sus clientes alimentos sanos, frescos, sin productos químicos y que han sido cosechados en la misma zona.
Vender de forma local los alimentos que crecen en tu huerto urbano a negocios colindantes ha pasado de convertirse en una moda a convertirse en una realidad que ha llegado para quedarse. Disfrutar de una mayor calidad de vida y rentabilizar el hecho de contar con un huerto urbano pueden ir de la mano. Para poder en marcha un huerto urbano con el objetivo de obtener un beneficio económico del mismo será preciso que te hagas estas preguntas:
- ¿Cuál será tu segmento de clientes?
- ¿Cuáles serán tu canales de distribución?
- ¿Cuál es la relación que establecerás con tus clientes?
- ¿Cuál es el flujo de ingresos que prevés obtener?
- ¿Cuáles serán las actividades clave que deberás desarrollar?
- ¿Te apoyarás sobre una red de alianzas?
- ¿Cuál es la estructura de costos que supondrá esta actividad?
Lógicamente, al tratarse de una actividad económica es necesario que actúes como lo harías que abrieses, por ejemplo, una tienda de alimentación, es decir, tendrás que llevar a cabo los trámites necesarios para tener los permisos precisos para poder vender los productos que se generen en tu huerto.
Asimismo, será preciso que estés dado de alta en la Seguridad Social y en Hacienda, ya que no deja de ser un trabajo como cualquier otro por el cual deberás declarar todas las ganancias que obtengas de la venta de vegetales y hortalizas, de lo contrario, podrías tener serios problemas, de ahí que sea preciso que este negocio lo lleves a cabo con total meticulosidad para que todo funciones a la perfección y sin problema alguno.
A todo ello, también debe decirse que no son pocos quienes también se deciden a realizar donaciones a comedores sociales, así como a ONGs para poder ayudar a aquellas personas que están más necesitadas. ¡Haz de tu huerto urbano un negocio!